16 Mas, una vez fortalecido en su poder, se ensoberbeció hasta
acarrearse la ruina, y se rebeló contra Yahveh su Dios, entrando en
el
Templo de Yahveh para quemar incienso sobre el altar del incienso.
17 Fue tras él Azarías, el sacerdote, y con él ochenta sacerdotes de
Yahveh, hombres valientes,
18 que se opusieron al rey Ozías y le dijeron: «No te corresponde a ti,
Ozías, quemar incienso a Yahveh, sino a los sacerdotes, los hijos de Aarón,
que han sido consagrados para quemar el incienso. ¡Sal del santuario
porque estás prevaricando, y tú no tienes derecho a la gloria que viene de
Yahveh Dios!»